Policiales
Alumno del San Basilio acusado por amenazas de bomba al Santa María
Un estudiante del Instituto San Basilio Magno fue demorado unas horas acusado de realizar las llamadas anónimas al CIO 911 que alertaban sobre la presencia de una bomba en el colegio Santa María y que implicó la evacuación de la comunidad escolar esta mañana en el centro posadeño.
La comunidad educativa del Instituto Superior Santa María vivió un angustiante momento por la mañana de este lunes, cuando agentes de la Policía de Misiones irrumpieron en el edificio escolar con el fin de resguardar la vida de los estudiantes y docentes y ejecutar el protocolo de seguridad ante una amenaza de artefacto explosivo que se activó tras llamadas anónimas al 911.
Aproximadamente a las 10 de hoy, los uniformados acudieron rápidamente al establecimiento ubicado sobre la calle céntrica Buenos Aires, entre Bolívar y San Martín, para evacuar el predio, bloquear las arterias aledañas y realizar recorridas exhaustivas por los pasillos, aulas, patios y baños del lugar con ayuda de profesionales anti-bomba de la dirección de Bomberos de la fuerza provincial.
Con los trabajos de rigor realizados, confirmaron que no había ningún peligro real en colegio posadeño y los investigadores iniciaron un operativo para rastrear la línea telefónica desde donde se habían efectuado las llamadas e identificar al propietario del teléfono y autor de las amenazas.
Fue así que los efectivos policiales identificaron y ubicaron a un joven de 18 años, estudiante del colegio San Basilio Magno, como posible responsable de las llamadas.
El muchacho fue demorado y unas horas después recuperó su libertad tras ser notificado de la causa “intimidación pública” que ahora pesa en su contra y por la que deberá presentarse en los próximos días ante Justicia. En tanto, su teléfono fue incautado para ser sometido a las pericias pertinentes.
Uso de celular prohibido
Al conocerse la noticia de que se trataba de un estudiante del San Basilio Magno, quien habría llamado al 911 para alertar de la supuesta bomba en otro colegio posadeño, las autoridades prohibieron el uso de teléfonos y aparatos tecnológicos dentro del establecimiento.
“Con el objetivo de fomentar un ambiente de aprendizaje enfocado y respetuoso en nuestra institución, no podrán utilizarse los teléfonos celulares y dispositivos electrónicos personales dentro de las instalaciones del instituto”, informaron a la comunidad educativa a través de un comunicado oficial.
En el caso de que algún estudiante acuda al colegio con celular “deberá entregarlo al preceptor para su resguardo hasta el horario de salida”, remarcaron los directivos del colegio privado.
En esa misma línea, enfatizaron en el comunicado: “Si es encontrado (el estudiante) utilizando el celular u otro dispositivo tecnológico sin autorización o en forma indebida, se mantendrá el dispositivo en resguardo bajo constancia escrita y se comunicará al tutor que retire el dispositivo de Dirección de Estudios y se notificará del acta de compromiso que se labrará con el estudiante”.
Asimismo, las autoridades del San Basilio Magno expusieron que en caso de que el alumno “reitere su conducta” aplicaran las sanciones establecidas en el reglamento interno de la institución.
Por último, en otro apartado del comunicado, la institución se “deslinda la responsabilidad por el uso indebido en comunicaciones personales, grupales o redes sociales” de sus estudiantes.
Judiciales
Ratifican prisión preventiva a imputado por el femicidio de Ramona Morínigo
La Cámara de Apelaciones confirmó la resolución de prisión preventiva dictada contra Jonatan Jordan Campedo Páez (34), único imputado por el femicidio de su pareja Ramona Isabel Morínigo (39) y, de esta manera, continuará privado de su libertad hasta el juicio oral donde se determinará su responsabilidad en el hecho.
De acuerdo a lo consignado por fuentes consultadas por La Voz de Misiones, la resolución fue firmada en las últimas horas por los magistrados Alberto José López y María Ruth Dilaccio, integrantes de la Sala II del tribunal de alzada.
Con esta medida, los camaristas rechazaron los planteos esgrimidos por la defensa del imputado y ratificaron todo lo actuado por el magistrado Marcelo Cardozo, titular del Juzgado de Instrucción Uno de Posadas, quien dirige el expediente que tiene a Campedo Páez procesado por “homicidio calificado por la relación de pareja”, es decir, femicidio, delito que prevé una pena de prisión perpetua.
Femicidio
El hecho que aún se encuentra en etapa investigativa y en el cual Campedo Páez aparece como único sospechoso, se registró en la noche del 17 de febrero pasado, aunque la víctima falleció tras seis días de agonía en el hospital Madariaga.
Los elementos recolectados permiten reconstruir que esa noche Ramona Isabel Morínigo, más conocida como Isa, se encontraba junto al sospechoso en su casa en el barrio San Onofre, hasta que se produjo una discusión que terminó de la peor manera.
Los investigadores sostienen que, en medio de la discusión, la mujer fue rociada con alcohol y prendida fuego, agresión que le provocó quemaduras graves en el 50% del cuerpo, heridas que principalmente se localizaron en cabeza, rostro, cuello y miembros superiores.
Después de ello, la mujer fue trasladada por su propia familia al hospital Madariaga, donde pasó seis días internada en grave estado de salud,
El sospechoso, por su parte, escapó del lugar y fue detenido minutos después en cercanías a la terminal de colectivos.
Campedo Páez permanece privado de su libertad de ese día y al momento de prestar declaración indagatoria se desligó del hecho, asegurando que la víctima se auto infringió las lesiones con intenciones suicidas.
“El hecho ocurrió a la noche, casi llegando a la medianoche. La familia de ella alcanzó a ver una llamarada por la ventana y luego ella salió corriendo. Su hijo adolescente llegó a ver lo que ocurrió y ella alcanzó a decirle a su familia que su pareja la había atacado”, contó en su momento Nancy Jara, una letrada posadeña cercana a la familia de la víctima.
Ramona era madre de tres hijos, todos en edad de adolescencia y pre-adolescencia. Había retomado su relación con Campedo Páez tan solo 15 días antes del hecho.
Prisión preventiva para acusado de prender fuego a su pareja en San Onofre
Judiciales
Joven de San Javier fue condenado a 14 años de cárcel por homicidio
El Tribunal Penal Uno de Oberá condenó este mediodía a 14 años de prisión a un joven oriundo de San Javier tras hallarlo penalmente responsable del asesinato de su vecino Miguel Do Nacimiento (22), crimen que se registró a mediados de 2020 en la localidad azucarera.
El debate oral se desarrolló hoy y el condenado se trata de José Hernando Álves de Olivera (25), quien fue declarado autor de los delitos de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego y tenencia ilegal de arma de fuego, en concurso real”.
La sentencia fue impartida por los magistrados Francisco Aguirre, Horacio Paniagua y Jorge Villalba (subrogante), quienes coincidieron con el monto de pena solicitado por la fiscal María Gisela Casafús durante la exposición de los alegatos finales.
El caso que se ventiló en debate oral se registró durante la tarde-noche del 2 de julio de 2020, en el barrio Nueva Esperanza de San Javier.
Eran aproximadamente las 19.30 cuando en esa zona se desató una gresca por viejas rencillas entre los implicados. Según se reconstruyó, Do Nacimiento portaba un machete y su contrincante extrajo un revólver calibre 22 milímetros.
Fue en esas circunstancias que Do Nacimiento terminó recibiendo un balazo en el abdomen y falleció minutos después, luego de ser trasladado en forma particular hasta el hospital local.
De Olivera, en tanto, escapó de la escena en su motocicleta y fue capturado días después en cercanías a Picada Unión, en la localidad de Itacaruaré, a pocos kilómetros de San Javier.
Desde ese momento el implicado permanece privado de su libertad y ahora deberá purgar una condena de 14 años de prisión.
Policiales
Investigan la muerte de un detenido en la comisaría de Concepción de la Sierra
Un joven que estaba detenido en la comisaría de Concepción de la Sierra falleció esta madrugada tras sufrir una descompensación dentro de su celda y el hecho es investigado por el Juzgado de Instrucción Cuatro de Apóstoles, cuyo titular, el magistrado Miguel Ángel Faría, ordenó que las pericias del caso sean realizadas por agentes de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA).
De acuerdo a la información oficial, el fallecido se trata de Lucas José Escalante (30), quien se encontraba detenido en dicha dependencia policial desde el pasado 25 de octubre.
La versión aportada por el personal de guardia indica que cerca de las 4.30 de hoy el interno estaba sentando dentro de su celda y comenzó a pedir ayuda porque se sentía “descompuesto”, pero apenas unos minutos después se desvaneció y perdió la vida.
En el hecho trabajaron agentes de la comisaría local y personal de salud, aunque una vez notificado de lo sucedido el juez Faría dispuso que los peritajes de rigor sean efectuados por la GNA a fin de despejar dudas y brindar mayor transparencia a la investigación.
Desde la fuerza provincial añadieron que Escalante había episodios similares, debiendo ser hospitalizado en varias oportunidades.
La Justicia envió el cuerpo a la morgue para la realización de la autopsia, estudio que determinará la causal de muerte.
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